Acoso, toqueteo, abuso psicológico, violación y muerte son distintas palabras que pueden usarse para describir la cotidianidad de la vida de las mujeres en México.
Pero todo es un adiestramiento que comienza desde que son pequeñas, se les enseña lo que deben y no deben hacer: qué ropa usar, qué comportamiento tener, cómo hablar, cómo actuar y cómo pensar. A las mujeres se les inculca que no deben de decir groserías, que deben de sentarse como "señoritas", que no pueden salir de noche porque es peligroso, que se deben "dar a respetar", que deben buscar un marido y ser amas de casa. Y no se discrimina a nadie, sin embargo, el problema es cuando no es por convicción sino por imposición. Asimismo, que a los hombres no se les enseñe a respetar, a no violar y no matar.
Ser mujer en México es aguantarse, aguantarse abusos, prejuicios y violencia, aprender a callarse porque "Calladita te ves más bonita". Ser mujer en México significa ser menos, ser menos inteligente, menos hábil y menos capaz que un hombre, siendo solamente un adorno y un trofeo para satisfacerlos. Ser mujer en México es exigir por derechos, por respeto y por que no las violen cuando esto no debería de suceder. Ser mujer en México significa ser etiquetada de "puta" por tener una vida sexual activa.
Y el trasfondo de este problema es la sociedad machista y misógina, que antepone al hombre por sobre todas las cosas. Si una mujer es acosada y/o violada, la culpa será de ella, por ser provocativa, por dejar que le suceda. Si una mujer sufre de violencia doméstica, la culpa será de ella por permitirlo.
Al día mueren alrededor de 9 mujeres por básicamente existir y es un tema invisible para mucha gente. Mueren madres, hijas, tías, abuelas, amigas y novias: desmembradas, violadas, quemadas, enterradas, ocultas. Por lo general y lamentablemente, son víctimas de personas cercanas a ellas.
Vivimos en una sociedad sin empatía, que arrebata vidas inocentes, que justifica a los asesinos y acosadores, sin entender que el problema no son las mujeres, que las víctimas tienen familia y que gracias a quienes violentan, viven un infierno en vida.
Es una lástima que las mujeres no puedan expresar su verdadero ser, de salir sin miedo a no regresar, de no utilizar alguna prenda por miedo a ser sexualizadas, de poder vivir libres.
Las mujeres son víctimas diariamente, son invisibilizadas por parte de la sociedad y privadas de una realidad con paz. Son malditas desde su nacimiento, simplemente por ser mujeres.
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